La ADORACIÓN NOCTURNA es un movimiento de la Iglesia impulsado por el Papa y los Obispos, conscientes de la necesidad que existe de:
ESCUCHAR a Jesús que nos habla.
REVITALIZAR con la oración la vida espiritual de los creyentes.
SER EL SOPORTE de la obra evangelizadora de la Iglesia.
REPARAR por las injusticias y desórdenes de esta sociedad.